Desde niño sabía cuál era su plan de vida; no hay límites, la clave es trabajar, esforzarse y dar lo mejor en todo lo que emprendas.
Alguna vez hubo quien dijo “no se puede”, pero lejos de caer en el desánimo, siguió con esmero cada uno de sus sueños.
En realidad, no es político, de hecho, jamás imaginó estar en ese ambiente, donde los sinsabores y obstáculos para alcanzar sus planes, fueron y son, un camino que transita con gran tenacidad.
Gracias al amor de sus padres, quienes lo impulsaron a creer en sí, hoy dedica todo su empeño a ayudar a quienes se acercan a él, con la confianza de recibir aliento, apoyo y motivación.
Aunque hoy forma parte del Congreso de Tamaulipas, no se olvida de sus raíces; escucha, atiende y abraza a quienes le han dado la confianza en esta responsabilidad.
Su aliciente, las muestras de cariño de la gente, que como él, tuvo que enfrentar las dificultades que le tocó vivir, sin olvidar, nunca, los difíciles momentos vividos.
Hoy, con humildad y gran agradecimiento, apoya, en lo que su capacidad le da, a quienes necesitan de una mano amiga, que les escuche y represente, aunque no es nada fácil, las cosas que se hacen de corazón, perduran toda la vida.